¡El agua es vida! Para garantizar agua limpia cada día, las plantas de tratamiento de aguas potables y aguas residuales deben cumplir tanto las normativas nacionales sobre calidad del agua como operar de forma económica. Nuestro sensor para procesos de desinfección con tecnología Memosens 2.0 le ayuda a hacerlo posible.
Beneficios
- Valores continuos y precisos: gracias a los sensores amperométricos puede monitorizar su proceso en tiempo real sin las interrupciones típicas de la medición colorimétrica. De esta forma puede dosificar el desinfectante de manera aún más precisa y eficiente.
- Una puesta en marcha rápida se traduce en una alta disponibilidad de la planta: con la conexión "plug and play" es posible conectar fácilmente los sensores precalibrados. Y la optimización del tiempo de polarización permite obtener un valor medido estable más rápidamente, garantizando una pronta disponibilidad de la planta.
- Control eficiente del proceso: muchos sensores amperométricos responden lentamente tras largos períodos sin cloro. El corto tiempo de respuesta de nuestros sensores le permiten reaccionar de inmediato, garantizando un control de procesos eficiente y seguro.
- Fácil mantenimiento: equipados con Memosens 2.0, los sensores pueden almacenar grandes cantidades de datos, por ejemplo, de calibraciones. Puede utilizar el contador de electrolitos para optimizar la estrategia de mantenimiento. Además, las membranas convexas y robustas minimizan las necesidades de mantenimiento.
- Reducción de los costes operativos y de mantenimiento: en comparación con los sistemas de medición colorimétricos, no es necesario utilizar reactivos ni eliminar los desechos que estos generan. Un menor mantenimiento y menos errores de medición también reducen los costes del punto de medición.
En general, estas ventajas le ayudan a optimizar la dosificación, reducir el personal y el tiempo necesario y disminuir los costes operativos del punto de medición en aplicaciones de agua y aguas residuales, como por ejemplo:
El nuevo sensor de cloro total: ¡siempre en alerta!
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Plantas de tratamiento de aguas residuales: fiables hasta incluso en ausencia de cloro
La legislación nacional exige que se determine el cloro libre o total de los efluentes. Sin embargo, es posible que el cloro se haya eliminado a tal grado que resulte indetectable. El reto para los sensores de cloro es mantener unas mediciones fiables incluso tras largos períodos sin presencia de cloro. A diferencia de otros sensores, nuestros sensores de cloro, como, por ejemplo, el Memosens CCS53E para cloro total, resuelven este problema al no desactivarse en estas condiciones.
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Aguas potables: una mayor rentabilidad gracias a una dosificación perfecta
A menudo, el ozono es el agente preferido para la desinfección en plantas de tratamiento de agua potable debido a su alta reactividad. La señal de medición particularmente estable del sensor de ozono Memosens CCS58E (repetibilidad 0,055 mg/l) permite una dosificación aún más precisa, lo suficientemente alta para garantizar la eliminación efectiva de patógenos. Y, al mismo tiempo, lo más baja posible para no poner en peligro la salud y la seguridad de las personas y el medioambiente (y mantener los costes lo más bajos posible).
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Red de agua para consumo: valores precisos incluso a niveles traza
Para distribuir agua potable a los usuarios, se añade una pequeña cantidad de desinfectante al final del proceso de tratamiento en la planta. En este proceso se forman incrustaciones y se evita que el agua se vuelva a contaminar durante su transporte. En este caso, la desinfección suele ser a nivel de traza. Las versiones traza de los sensores Memosens CCS50E para dióxido de cloro y Memosens CCS51E para cloro libre son especialmente adecuadas para este propósito. Proporcionan resultados precisos incluso a niveles traza con una selectividad extremadamente elevada para el desinfectante.
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Desalinización: medición en depósitos llenos gracias a la medición del bromo
El agua de mar debe desinfectarse antes de su desalinización para minimizar la actividad biológica y, de este modo, aumentar el tiempo operativo de los filtros aguas abajo y de la planta de desalinización. Una de las características especiales del agua salada es que contiene una mayor cantidad de sales de bromo, que tienen un efecto desinfectante. Por lo tanto, la monitorización del cloro puro infravalora el rendimiento de la desinfección. Este problema se puede solucionar con una medición complementaria del bromo libre con el sensor Memosens CCS55E.
¿Qué tienen en común los superhéroes y los sensores para procesos de desinfección Memosens 2.0?
Vea el vídeo completo.
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